Las asas en el reverso a dos manos
Mango: podemos predecir dos, continental para la mano derecha, mientras que oriental para la izquierda, que nos encargaremos de poner la derecha sobre el mango de la raqueta. Estamos listos para recuperar la raqueta de forma lineal y con un simple movimiento, manteniendo los brazos bastante extendidos y los codos no demasiado flexionados.
Mejor que usar un poco las muñecas y sujetarlas para tener la raqueta con la placa de cuerdas paralela a la red para todo el movimiento de impacto. De esta manera, la pelota debe salir derecha con un gran empujón y terminar en la otra mitad de la cancha.
¿Hay algo más que saber sobre el revés a dos manos? Si empezamos de cero, es más fácil aprender que el clásico revés, y "perdonar" más. En el sentido de que tiene muchas de las ventajas de una recta y te permite llegar a la pelota aunque no hayamos empezado de una manera muy rápida o si la pelota está muy alta o muy baja. Una versatilidad que no es característica del revés con una sola mano.
Pero entre los contras del revés con dos manos se encuentra sin duda la posición de nuestro cuerpo en su conjunto, más rígida que la elegancia del revés con una sola mano. Hace unas décadas se decía que el revés a dos manos era desventajoso porque obligaba a mejorar la pelota para poder golpearla, ya que con las dos manos hay menos extensión. Décadas de campeones y aficionados que han practicado el tiro demuestran lo contrario: con el revés con una sola mano, plano, giro superior, te ves forzado a dirigirte bien hacia la pelota, ya que ésta debe ser tomada por la fuerza delante del cuerpo.
Importante recordar para los que se acercan al tenis, más allá de la elección entre un revés bimano o una mano, sigue siendo esencial saber cómo manejar el revés con una mano cortada, porque ese es el tiro que te permite jugar muchas de las pelotas fuera de posición: demasiado alto, demasiado bajo, demasiado lejos.